Francisco Contreras, compañero del Departamento de Producción de Greening, nos explica las ventajas de uso de los paneles con dos caras, denominados paneles bifaciales.

En este artículo vamos a tratar la evolución técnica de los paneles fotovoltaicos consistente en la incorporación de células fotovoltaicas en ambas caras del panel. Estos módulos fotovoltaicos se denominan paneles bifaciales.

Uno de los factores limitantes a la hora de plantear una instalación fotovoltaica, es sin duda, el espacio disponible. En el mejor de los casos, necesitaremos un metro cuadrado de superficie por cada 200 Vatios pico de producción en paneles (sin contar pérdidas en cableado, inversores, etc.). Esto es debido a la eficiencia de los paneles fotovoltaicos en base silicio, la cual ya hace años, no es capaz de superar el 25%, es decir, solo se convierte en electricidad un 25% de la radicación solar incidente sobre la superficie del panel.

Aumento del rendimiento de las células fotovoltaicas con nuevos materiales

Son multitud de investigaciones en curso las que tratan de aumentar el rendimiento de las células fotovoltaicas utilizando otro tipo de materiales. Así, por ejemplo, se estudia un material híbrido orgánico-inorgánico denominado perovskitas (plomo, yodo y una molécula inorgánica), o las kesteritas (cobre, zinc, estaño, azufre o selenio).

Estos nuevos materiales poseen inconvenientes. En el caso de las perovskitas, contienen plomo, altamente contaminante y peligroso para la salud y en el caso de las kesteritas, bajo rendimiento.

Aumento de la superficie disponible para conseguir mayor eficiencia: paneles bifaciales

Es por ello, que se plantea la necesidad de aprovechar al máximo la superficie disponible y maximizar así la producción fotovoltaica. Teniendo el límite del 25% de eficiencia de los paneles, cabría una solución, aumentar la superficie de exposición colocando células fotovoltaicas en ambas caras de los módulos fotovoltaicos. De este modo, se puede obtener una producción de la radicación reflejada en la superficie (cubierta, terreno, etc.) es decir, el albedo.

Esta radicación reflejada depende sobre todo del color de la superficie sobre la que incide. Las superficies claras poseen un alto valor de albedo y las oscuras muy bajo. El albedo medio de la tierra se sitúa en torno al 38% de la radicación solar.

Resultados de los paneles bifaciales frente a los paneles monofaciales

Asegurar un porcentaje de producción extra es bastante arriesgado ya que depende de muchos factores (altura de instalación de los módulos, superficie sobre la que se instala, inclinación, etc.), pero sí que se puede decir que los paneles bifaciales ofrecen una potencia un 30% superior a sus hermanos monofaciales con iguales dimensiones.

Los paneles bifaciales cumplen a la perfección el criterio “KISS” (Keep it Simple and Stupid), ofreciendo una mejora a un problema (limitaciones de espacio), mediante soluciones fáciles y efectivas.


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